Descripción

Jasmin Meirose, nacida en Múnich, vive y trabaja en Colonia. Tras estudiar Bellas Artes con especialización en pintura en la Escuela Libre de Arte de Colonia, desarrolló un lenguaje visual inconfundible, caracterizado por una gestualidad expresiva, una inmediatez emocional y un rechazo deliberado del embellecimiento estético. Su serie PAINT IT LOUD ejemplifica una pintura que no solo es forma de expresión, sino también forma de resistencia – contra las convenciones sociales, contra las narrativas dominantes de la historia del arte, contra el silencio. Las obras de Meirose surgen de una acción corporal inmediata: aplicación de color, huellas del proceso pictórico, superposiciones y rupturas permanecen visibles. En esta inmediatez pictórica se articula una urgencia existencial: el deseo de visibilidad, de control sobre la propia imagen, de liberación de las expectativas. Las obras suelen ser crudas, contradictorias, ruidosas – y precisamente ahí radica su fuerza. Los polos temáticos centrales son el poder y la impotencia, la identidad y la asignación, la autoafirmación y la memoria colectiva. Llama especialmente la atención su estrategia de “reescritura de imágenes”: íconos de la historia del arte – Susana en el baño, el mito del artista Van Gogh, el motivo de la musa – no se citan, sino que se despojan de poder, se transforman y se recodifican. No se trata de rechazar la tradición, sino de apropiársela. La figura femenina ya no aparece como objeto de contemplación, sino como sujeto de acción. Formalmente, sus obras oscilan entre el neoexpresionismo, el art brut y una estética que recuerda al muralismo político y al arte urbano. Los colores son intensos, los trazos directos, las composiciones desbordantes. Y sin embargo, nunca parecen aleatorias – todo es expresión de una actitud, de un mensaje personal y político. La ironía que atraviesa algunas obras no es nunca banal, sino afilada y reflexiva. Rompe el patetismo sin perder seriedad. Jasmin Meirose no concibe la pintura como un acto contemplativo, sino como una protesta performativa. Su arte es una invitación al roce y al enfrentamiento con nuestro presente. Declaración: "No pinto para agradar. Pinto para que algo hable. Un cuadro no debe explicar, debe exigir. PAINT IT LOUD es mi grito por visibilidad."